La fachada del siglo XX se puede resumir en dos formas muy diferenciadas: por un lado estaba el prisma de cristal, en el que se aunaban todas las ideas de racionalidad de arquitectos como Mies van der Rohe, y por el otro se situaba la corriente admiradora del hormigón armado y las posibilidades de moldeado que ofrecía. Dentro de esta segunda corriente se sitúan los edificios más organicistas y la fachada curva que caracteriza a muchos de ellos, como ocurre en las obras de Wright, por ejemplo.
Además de la forma, la fachada de los edificios de estas dos corrientes se diferenciaban también en la utilización de la iluminación natural y la transparencia de su material. La fachada prismática se resolvía muy a menudo a base de vidrio, mientras que las formas curvas de la fachada orgánica eran más difíciles de resolver con materiales transparentes. Normalmente, la fachada de hormigón contaba con muy pocos huecos de iluminación natural y las grandes curvas de la fachada de hormigón se pintaban de blanco para resaltarlas dentro de un paisaje urbano lleno de ángulos rectos.
La fachada de policarbonato celular permite una vuelta a la libertad de las formas más orgánicas sin sacrificar la iluminación natural en el interior de los edificios. Empresas como Danpal® ofrecen paneles traslúcidos de policarbonato celular que recorren verticalmente toda la fachada, de forma que casi se eliminan en su totalidad las juntas horizontales.
Además, los paneles de policarbonato celular para fachada de Danpal® pueden curvarse en frío para adaptarse a cualquier radio de curvatura que salga del lápiz del arquitecto. Esta libertad ha propiciado la vuelta a la fachada orgánica que se convierte casi en monumento dentro de la trama urbana.
Danpal ofrece paneles de policarbonato celular en diversas tonalidades con las que se puede jugar para acentuar aún más las líneas curvas de la fachada proyectada, con la gran ventaja sobre el hormigón armado de la durabilidad. La fachada de policarbonato celular de Danpal® se mantiene casi como el primer día durante toda la vida útil del edificio con un mantenimiento muy reducido, evitando el efecto “viejo” que a veces ofrecen los edificios de hormigón al poco tiempo de haberse construido.
Los paneles de policarbonato Danpal® tienen tras de sí una gran inversión en investigación y desarrollo para mejorar y ampliar cada día la oferta de paneles de fachada con las mejores características de diseño, aislamiento térmico y acústico, así como resistencia al fuego que se pueda ofrecer para cualquier tipo de fachada que proyectan los diseñadores del siglo XXI.
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